Chile y su 11 de Septiembre

 

 

Hemos escuchado bastante las historias relacionadas al golpe de estado últimamente... Es el tema de moda en este, nuestro mes de la patria. Todos los años, se sufre el duelo nacional por la pérdida de la democracia y del corte brutal en la historia política de Chile. La toma del gobierno “Por la Fuerza y no por la Razón” y luego, días después, todo se olvida con alcohol y comida en la fiesta que conmemora la primera junta de Gobierno. La llamada Independencia de Chile.

 

Este ultimo año se ha acrecentado la tendencia a comentar, a revivir el golpe, la Televisión nos muestra imágenes que nunca antes habían sido mostradas, nos cuentan la historia desde varios puntos de vista, el desfile de documentales que deberíamos ya conocer, pasan y pasan por la TV, los políticos opinan, se lavan las manos, se culpan entre sí, explican, justifican, muestran hipócritamente sentirse cercanos o dolidos con el proceso que pudo o no justificarse como legitimo, que pudo o no ser la solución ante el temor de un futuro incierto en ese momento para el país, para las diferentes clases que compartían este pedazo de nación... Aunque, finalmente, siempre se “pasan la pelota”.

La población adquiere ese sentido social que debió tener este hecho desde siempre… los niños preguntan, los padres cuentan cada uno su historia desde su punto de vista… Es porque recién se está tomando verdadera conciencia de lo que sucedió hace 40 años o porque realmente les importa a políticos, medios de comunicación y chilenos en general?

Día a día vemos políticos que avalan y fomentan el desorden social, como una única estrategia maquiavélica. El “Divide y Vencerás”, como se dice, es la mediocre estrategia que sigue la política chilena en cada conflicto social de los cientos que se han visto (y no se han visto) últimamente en el país.

Y respecto a las palabras Juicio, Perdón y Olvido, nunca han sido los objetivos de los políticos, por lo mismo, después de 40 años, aun no se ha podido cerrar la herida de una nación, y no se ha podido pagar la deuda con las miles de vidas arrebatadas por este proceso.

Por eso, quien más feliz que la clase política de que el pueblo salga a la calle y se violentice, mas si es en honor a estas fechas.

 

 

Por otra parte nosotros, que somos resultado de la imposición por la vía armada, a la fuerza y gracias al derrame de sangre y sufrimiento de personas que podrían haber sido nuestros padres o abuelos, nosotros que, gracias a la historia, somos resultado de un sistema capitalista que da valor a la gente en función de su poder adquisitivo, debemos preguntarnos si realmente ¿Tenemos la intensión de olvidar lo poco y nada que hemos aprendido de todos estos hechos?

Porque nosotros sabemos que la historia la escriben los ganadores, con la sangre derramada de los muertos, sabemos que el verdadero opresor y culpable del golpe de estado, viene de mas allá, y no es la típica imagen facistoide de un títere vestido de militar, sino un águila que planea en las más altas cumbres del imperio, que todo lo ve y todo lo busca dominar. Sabemos que su intensión ha sido mucho más que la de imponer un nuevo sistema, una intensión mas burda y simplona fomenta toda la maraña de sucesos políticos y económicos que han golpeado nuestro país y muchos mas… la intensión de explotar, hasta el agotamiento, lo valioso de nuestra tierra...

 

 

Valiosos recursos que no son necesariamente dinero, que no se ven. Sabemos que lo que el gestor político, lo que quiere es abarcar ríos y mares para succionar sus recursos y devastarlos hasta creer saciados sus deseos de poder y de dinero.

 

 

Siempre buscan algo mas, lo sabemos porque lo hemos aprendido. Porque su creencia dice que mientras más, mejor. “Mientras más poseas mejor serás”, y lo sabemos porque intentando lavar nuestra mente con banalidades, nos han enseñado a pensar como ellos. Nos han enseñado a acaparar la libertad, a someter al más débil, a abusar del ignorante, a creer en dioses que no existen.

 

 

Sabemos que en medio oriente ya ha sucedido. En Centroamérica también. Las alas del águila cubren nuestro pequeño espacio, talan nuestros árboles, se beben nuestras aguas y sus garras escarban nuestra cordillera para llevarse nuestros metales. 

Tenemos conciencia de que en algunos años más, cuando no tengamos tributos que entregar al imperio, pasaremos a ser una nación pobre, que sueña con ser alguna vez desarrollada. Sabemos que ese desarrollo no llegara, ni en conocimiento, pues nos lo han negado, ni en capacidad, pues nos han envenenado.

 

Tenemos conciencia de que si alguna vez queremos volver a ser una nación libre de su dominio, ella nos dará un nuevo golpe que sacudirá nuestra tierra. Sabemos que sea quien sea que este al mando de nuestro pueblo, sea de izquierda, derecha, arriba o abajo, si osamos intentar quitar la presa de sus garras, sufriremos lo mismo que sufrió nuestra nación hace 40 años. Un nuevo golpe se asestara sobre nuestra tierra que apenas ha sabido lavar las manchas de sangre que hoy ocasionan disturbios y violentizan al país.

 

 

Por eso, nuestros objetivos son la protección de nuestros hijos. Por eso, la necesidad de valorar el presente y disfrutar la vida. Por eso la filosofía de que debemos ser felices hoy y no mañana.

Porque mañana, cuando no tengamos recursos, no tendremos valor. Porque así es el capitalismo, porque ese es su error y porque es lo único que hemos aprendido.

 

 

Y por eso, este 11 de Septiembre será de recogimiento, y el 18 será de olvido, hasta el próximo año.